DIVORCIO SIN HIJOS

Un divorcio sin hijos permite que los cónyuges puedan disponer con libertad y autonomía de su matrimonio pues carecen de vínculos paternofiliales.

En los divorcios y separaciones matrimoniales sin hijos no intervendrá el Ministerio Fiscal, ni en los procedimientos amistosos ni contenciosos.

Se tendrán que regular las cuestiones patrimoniales de bienes y deudas comunes, pero es algo dispositivo en el sentido de que ambos tienen derecho realizar los pactos y actuaciones que consideren oportunos pues en definitiva sus bienes y deudas son suyos y allá cada uno con sus decisiones.

Cuando hay hijo sí existe una responsabilidad que no pueden eludir pues el bien jurídico más digno de protección en separaciones con hijos son estos.

En un divorcio sin hijos existe la posibilidad de tramitar el proceso amistoso o contencioso y de no ponerse de acuerdo normalmente es por dos cuestiones:

  • Por no querer aceptar y favorecer la tramitación de la separación de uno de los cónyuges al otro.
  • Por no ser capaces de conciliar sus intereses patrimoniales y económicos.

Divorcio separacion de bienes sin hijos

El divorcio sin hijos y separación de bienes será el más sencillo. En este caso no existirán ni niños ni bienes gananciales y por ello en todo caso habrá que acordar lo relativo al uso del domicilio familiar y lo que consideren oportuno respecto de los bienes que puedan ser comunes por haberse comprado en una determinada proporción.

Desde nuestro despacho de abogados recomendamos a todo aquel que quiera casarse y se esté planteando cual es el régimen económico más conveniente que opte por el de separación de bienes.

¿Por qué?

  • En primer lugar, por ser el régimen económico matrimonial más entendible y sencillo pues cada propietario será dueño de aquello que le pertenezca por ser de su titularidad. Podrán existir bienes de titularidad conjunta, pero existirá una proporción concreta de cada uno de ellos.
  • En segundo lugar, el régimen de separación de bienes permitirá que cada uno de los esposos pueda gestionar dentro de sus posibilidades su patrimonio que no estará limitado como ocurre en el caso de los bienes gananciales.
  • En tercer lugar, por no comprometer los bienes de nuestro cónyuge. Por ejemplo, al tener separación de bienes a cada cónyuge le podrán embargar o quitar sus propios bienes de los que es responsable, pero no los del otro cónyuge que son independientes.

En un matrimonio sin hijos y con separación de bienes será mucho más fácil ponerse de acuerdo pues nos encontramos ante el panorama en el que los cónyuges tienen menos vinculaciones matrimoniales. Evidentemente si los cónyuges no tienen vinculación que regular el entendimiento será mucho más simple.

Divorcio sin hijos y bienes gananciales

El divorcio sin hijos y con bienes gananciales no tiene necesariamente que ser complicado, pero desde nuestro punto de vista supone varios retos a tener en cuenta. A pesar de no tener hijos y aparentemente parecer que el divorcio será sencillo, en ocasiones no lo es.

¿Por qué?

En primer término, por no saber los cónyuges exactamente qué es la sociedad de gananciales. En muchos casos los cónyuges desde que se han casado están creando, modificando y extinguiendo derechos y obligaciones en su sociedad de gananciales, pero no se han parado a pensar y entender que es lo que supone.

En España al igual que en otros muchos países se idealiza el matrimonio y dos personas que se casan no se ocupan de informarse diligentemente de sus vinculaciones matrimoniales. Muchos matrimonios se casan en gananciales ya que “es lo normal” o lo que es, pero y hemos conocido en algunos casos, ni se plantean que tengan un régimen matrimonial concreto.

Evidentemente si falla el punto de partida en el que no saben qué es el régimen económico de sociedad de gananciales en muchos casos todo el desarrollo patrimonial estará echo partiendo de la ignorancia y podrá suponer el riesgo de haber desarrollado sus vinculaciones patrimoniales de una manera errónea o inadecuada.

En ocasiones los esposos tienen su percepción de sus derechos y obligaciones, pero durante el matrimonio estando a buenas, no le preocupan. Cuando surge la separación o el divorcio se apresuran a acudir a despachos de abogados para enterarse de sus derechos y las obligaciones del otro cónyuge y en ocasiones se llevan gratas e ingratas sorpresas.

Por ello antes de celebrar un matrimonio en gananciales o mantenerlo, debemos de tratar de entender qué supone y ser conscientes de que se pueden otorgar capitulaciones matrimoniales en todo momento. Para otorgar capitulaciones matrimoniales no es necesario gastarnos el dinero en abogados sino sólo ir ambos esposos al Notario de mutuo acuerdo para cambiar su régimen económico matrimonial.

Ya lo hemos dicho antes, pero lo repetiremos hasta la saciedad, el régimen recomendable desde nuestro punto de vista y adecuado a nuestra sociedad actual es la separación de bienes.

Divorcio mutuo acuerdo sin hijos

Un divorcio sin hijos debería de tramitarse de mutuo acuerdo pues no existen limitaciones paternofiliales que impidan la plena disposición de sus derechos y obligaciones matrimoniales.

Los beneficiados de un divorcio amistosos de mutuo acuerdo en definitiva serán los propios esposos. El divorcio de mutuo acuerdo es más fácil, rápido y económico por lo que no tendrá sentido entrar en un litigio en el que reuselva la regulación un juez por haber sido incapaces de entenderse.

Ante la inexistencia de hijos los esposos sólo deben de enfocar la ruptura como un trámite jurídico que consolide en derecho a quello que han decidido en su ámbito emocional. Algunas personas no entienden la diferencia encuanto el consentimiento del momento de la celebración del matrimonio y del divorcio.

Si bien es cierto que para celebrar un determinado matrimonio es necesaria la concurrente voluntad de ambos miembros de la pareja, para divoricarse es suficiente con el deseo de uno de ellos.

Por ello, el cónyuge que pide el divorcio tendrá derecho a obtenerlo pues no se le puede obligar a manentner un matrimonio que ya no desea. En cambio el cónyuge al que le piden el divorcio tampcoo estará obligado a facilitar el divorcio amistoso, pero debería de hacerlo por enteneder que es una de las posibildiades a las que se expone todo matrimonio.

El mantenimiento del matrimonio es un reto constante de mantner el deseo y proyecto de felicidad conjunta de ambos esposos pues para el caso de que uno deje de querer seguir con el matrimonio, debería de ser algo más normal que pueda pedir el matrimonio y que el otro así lo acepte y trate de facilitar en la medida de lo posible.

Al idealizar el matrimonio “para siempre” como el tradicional indisoluble se está perdiendo una gran parte de libertad y se están limitando la capacidad de las personas de entenderse con mediación extrajudicial.

Dos personas pueden entenderse si parten de una relación sana y justa en la que predomina la libertad, la igualdad y el respeto por encima de los intereses de cada uno de los esposos.

El divorcio no es un fracaso, pero no ser capaces de llegar a un divorcio de mutuo acuerdo en un matrimonio sin hijos si es una verdadera pena y más pena aún es mantener un matrimonio no deseado o infeliz

Divorcio contencioso sin hijos

Un divorcio contencioso sin hijos supone que el Juzgado va a declarar la disolución del vínculo matrimonial y establecerá las medidas accesorias a dicha declaración.

¿Qué resuelve la sentencia de divorcio? Declara como principal el divorcio (o la separación si es el procedimiento tramitado). Además, también declarará los hechos no controvertidos en los que las partes sí han estado de acuerdo y por tanto no forman parte de lo que debe de decidir el juez.

Pero sobre todo decide aquellos hechos controvertidos que son las cuestiones alegadas por cada una de las partes. Puede versar sobre los siguientes extremos:

  • Atribución del uso y disfruto del domicilio común, así como el ajuar familiar.
  • Establecimiento en su caso de una pensión compensatoria de uno de los cónyuges en favor del otro.
  • Pago de las deudas y cargas del matrimonio.
  • Otras cuestiones como atribución del uso de vehículos.

Divorcio express sin hijos 

Todo divorcio en España desde 2005 es express. ¿Por qué?, por regularse conforme la misma regulación que coloquialmente se conoce como “divorcio express”. Realmente la palabra de divorcio express parece dar a entender que el divorcio será rápido

 Pues bien, la única vía de divorcio realmente rápido es la de divorcio express de mutuo acuerdo ante Notario pues podrá ser inmediata y uno de sus requisitos esenciales precisamente es que no existan hijos comunes menores de edad ni incapacitados. El divorcio express de mutuo acuerdo judicial será más lento si es judicial y mucho más lento si fuera por lo contencioso.

Divorcio de mutuo acuerdo sin hijos

El precio de un divorcio sin hijos debe de ser económico y barato pues es la clave para reconducir el trámite por el mutuo acuerdo y evitar enfrentamientos. El divorcio es un mero trámite y por tanto debe de estar al alcance de todos.

Las minutas de los abogados de divorcio no siempre son asequibles para todas las personas y es por ello que defendemos el derecho al divorcio barato. Un divorcio económico que sea posible pagar con independencia de la situación y capacidad económica y que haga posible la igualdad real de asesoramiento.

No es justo que una persona pueda contratar a un buen abogado pues pueda pagarlo y otra se tenga que conformar con un mal abogado o aquel que no sea de su confianza por no poder costear otro. No sólo es importante por contar con un abogado económico sino además de calidad. Un letrado profesional en el que se pueda confiar a un precio barato que no suponga un impedimento para el acceso del proceso.

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