Pareja con diferencia de edad

Cada vez es más frecuente y está más normalizado las parejas con diferencia de edad. Antiguamente existían prejuicios que desincentivaban que dos personas estuvieran juntas si tenían más de 10 años de diferencia de edad.

Actualmente la edad es sólo un número pues el emparejamiento ya no tiene edad. Existen personas muy jóvenes con una mentalidad más propia de una edad más avanzada y personas más mayores con una vitalidad propia de una menor edad.

Lo importante es la compatibilidad sentimental de la pareja.

Pros y contras de parejas con diferencia de edad

Los pros de una pareja con diferencia de edad es que pueden enriquecer la relación con aprendizaje de vida con enfoques diferentes derivado de su diferente edad. Esto puede ser bueno cuando uno aprende del otro.

El contra es que precisamente una pareja con una edad diferente esté en una fase de madurez distinta. Es muy recurrente la situación en la que una personas más mayor haya vivido ya más etapas de su vida y se encuentre en una situación más asentada, mientas que la más joven tienda a querer vivir más cosas.

En ocasiones el contra es que la diferencia de edad les pueda hacer enfocar el proyecto sentimental de manera diferente.

Parejas con más de 30 años de diferencia
Pros y contras de parejas con diferencia de edad

Parejas con diferencia de edad de 10 años

Las parejas de edad con una diferencia de edad de 10 años no es determinante, pues es una edad que no supone una brecha generacional. Con 10 años de diferencia no están en fases de la vida muy diferentes. Aunque es difícil poner la linea en a partir de qué edad la diferencia de edad es mucho o poco, pues dependerá de la propia pareja, desde nuestro punto de vista 10 años no es una diferencia de edad relevante.

También debemos de tener en cuenta la edad que tiene los miembros de la pareja, pues cuanto más joven la apariencia de diferencia de edad se agudiza. Por ejemplo, si en una pareja uno tiene 18 y otro 28 la diferencia de edad y madurez puede ser de mayor calado que a partir de los 40 o 50 años.

La crisis de los 40 en ocasiones viene vinculada con diferencias de edad, de cara a que se quiera tener hijos, o no, comprar una casa, o no, y todo tipo de proyectos de vida que parece que a los 40 son replanteados. Separarse a los 40 lo que nadie te cuenta en ocasiones es que una ruptura es multifactorial y precisamente no hay que tomar decisiones condicionadas, pues pueden llevar errores y arrepentimiento.

Parejas con diferencia de edad de 30 años

Con 30 años de diferencia de edad la distancia generacional suele ser apreciable a simple vista. En definitiva estamos hablando de 30 años, lo que puede suponer que los padres del miembro de la pareja más joven tengan una edad similar al miembro de la pareja de mayor edad.

Esto puede ser algo indiferente o incluso positivo, o ser un detonante de que la relación a medio y largo plazo no funcione. Todo depende de la gestión sentimental que se haga de esa diferencia de edad.

Al separarse a los 50 lo que nadie te cuenta es que la diferencia de edad mal gestionada puede ser un factor que haya minado la relación. La edad en España para tener pareja es de 18 años, por lo que como joven, el miembro de la pareja tiene entre 18 y 20 años. Esto sumado a una diferencia de edad de 30 años nos hace concluir de que al menos el miembro de la pareja más mayor tenga al menos 50. Lo que suele deteriorar la relación suele ser en estos casos la diferencia de etapa vital, pues mientras que a la juventud se suele tener la necesidad o impulso de salir y formarse, a los 50 esa etapa ya pasó y se suele estar en una etapa de asentamiento de vida en la que se suele querer mantener la situación que se ha consolidad en los 30 años atrás.

En algunos casos combina a la perfección las etapas de parejas con diferencias de edad de 30 años, sobre todo cuando la persona más mayor es más vitalista y la más joven menos vitalista, de manera que sus edades les haces encajar a la perfección.

Abogado especialista en Derecho de Familia. Titular del bufete Abogados Cebrián & Asociados. Premio Nacional de Ley en Derecho de Familia 2020. Colegiado del ICAM 85.585.

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