Sólo tú sabes si quieres divorciarte, pero lo que hay que hacer es ordenar las ideas, aclarar sentimientos y tomar decisiones de las que no te vaya a arrepentir. Toda decisión tiene pros y contras, pues se opta por algo y correlativamente se descarta lo opuesto. Por ello, ante la duda merece la pena mantener un matrimonio, pero si se llega a la certeza de que lo mejor es divorciarse hay que saber divorciarse a tiempo, con respeto y sin tensionar la ruptura, de manera valiente y justa para nosotros y para nuestra pareja.
Las decisión que resuelva la duda de si la decisión correcta es la de divorciarse, o no, es personalísima. Si bien es cierto que la decisión la debe de tomar cada cónyuge a título individual, lo justo es que se pueda hablar en pareja para dar la oportunidad de resolver posibles dificultades.
La comunicación previa puede salvar un matrimonio con problemas. De no se posible evitar el divorcio es importante conocer y saber gestionar los trucos antes de divorciarse, para que sea más llevadero para ambos cónyuges y principalmente para los hijos comunes a los que se le pueden evitar disputas y daño familiar.
Divorciarse o no por los hijos
Querer divorciarse y no dar el paso por el reparo de pensar que puede ser malo para los hijos es muy frecuente. La mayoría de los matrimonios que sea acaban divorciando y tienen hijos reconocen tiempo después que han tomado la decisión demasiado tarde y que se arrepienten de ello pues la convivencia cuando necesitaba divorciarse no ha sido saludable. Es duro pensar que mi pareja solo está conmigo por nuestro hijo. A ello podemos añadir la pregunta de a qué edad de los hijos es mejor separarse. Hay matrimonios rotos que siguen juntos, pero es una decisión perfectamente respetable. Lo importante es que sea una decisión justa para el otro cónyuge y consciente.
Sentirse infeliz en el matrimonio no debe normalizarse. Los motivos de la infelicidad pueden ser muy claros o incluso no saber cuál es el motivo. Cada vez es más frecuente vivir dentro de un matrimonio tóxico, pero no ser consciente de ello.
La duda es muy difícil de resolver si es mejor separarme o aguantar por los hijos. Lo que hay que hacer es no dejarse condicionar por los demás y tomar decisiones autónomas y no permitir que decidan por nosotros o que nuestra inacción y falta de toma de decisiones decida tácitamente al no tomar una decisión expresa.
Tanto en una separación con hijos sin estar casados como en un matrimonio con hijos, lo que debemos de evitar es que exista mala relación entre los progenitores y se mantengan los niños sin convenio regulador, pues eso puede suponer exponerles a las desavenencias de sus progenitores. El mayor problema es que la relación de pareja se vaya deteriorando y no tengamos una regulación a la que atenernos para organizar la vida de nuestros hijos cuando ambos padres pueden llegar a tener una mala relación.
Cómo saber si divorciarse o no
Sopesar la idea de un divorcio sin hijos es mucho más fácil tanto en la toma de decisión como en la tramitación. Es posible tramitar el divorcio notarial siempre y cuando los hijos no sean menores de edad ni tengan la capacidad judicialmente modificada. De hecho incluso es posible acceder a un formulario de divorcio gratis, sin que ello suponga una limitación para poder acceder a la tramitación de un divorcio express.
Sólo uno mismo sabe si debe divorciarse o lo mejor es no hacerlo al igual que en su momento considero que existían circunstancias, situaciones y sentimientos que así lo hacían procedente. Saber si se mantienen no es fácil. Hay que poner en la balanza aquello bueno y malo y pensar si es viable el cambio y retomar la relación o si el matrimonio por desgracia a llegado a su final.
¿Cómo saber si es el momento de divorciarse?
Para saber si es el momento de divorciarse sólo debe de reflexionar para evitar tomar una decisión precipitada o equivocada.
En ocasiones lo importante es dejar de que nos condicionen cuestiones, pero que deben de seguir teniéndose en cuenta, pues forman parte de la realidad matrimonial. Pensar me quiero divorciar pero no tengo dinero, ya limita la toma de decisiones. Darle vueltas a qué es mejor pedir el divorcio o que te lo pidan. No es fácil pedir el divorcio, pero puede ser complicado también recibir la propuesta de divorcio de nuestro cónyuge.
Preguntarnos, qué hacer cuando te piden el divorcio, tal vez nosotros no reaccionaríamos igual que nuestro cónyuge. El divorcio es una decisión multifactorial. Hay que analizar las propiedades y las deudas. Si tenemos perro valorar si mi perro está a nombre de mi ex, o si por el contrario está a nombre mío. Cuáles son los ingresos y demás circunstancias. Todo debe de valorarse desde un punto de vista sentimental, pero también acudir a un abogado para recibir asesoramiento que permita contextualizar la toma de decisiones.
Cómo saber si es el momento de divorciarse
Si está leyendo esto es por haber sentido la necesidad de valorar si quiere mantenerse matrimonio, o divorciarse. En ocasiones lo que nos llena de dudas es el proyecto de vida posterior a la decisión de divorciarse. Pensar me quiero separar pero no tengo dónde ir, puede hacer que ni tan siquiera piense en el divorcio como una opción viable.
En el paso precio e importante, cómo saber si debo separarme test, consejos, reflexiones, todo puede ayudar, pero la decisión y responsabilidad es de usted. No debería de ser suficiente el hecho de sentir que tiene un matrimonio aburrido, pues toda relación tiene cosas mejores y peores.
En ocasiones son circunstancias externas las que nos condicionan. Por ejemplo, la crisis de los 40. No es nada fácil el divorcio a cualquier edad, pero separarse a los 40 lo que nadie te cuenta puede ser que además del cambio del divorcio existe un cambio por edad de vida que afecta a muchas personas.
Hay que diferenciar nuestros propios problemas de los problemas que tengamos con nuestro matrimonio, pues en ocasiones nuestra propia frustración hace que exijamos mucho a nuestra pareja pero tal vez no tengamos la empatía para ponernos en el lugar de él o ella que puede estar atravesando también sus propias circunstancias, tanto positivas como negativas.
Abogado especialista en Derecho de Familia. Titular del bufete Abogados Cebrián & Asociados. Premio Nacional de Ley en Derecho de Familia 2020. Colegiado del ICAM 85.585.